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Algunos mitos ampliamente difundidos sugieren que el grosor de un suelo laminado influye en su calidad y resistencia. Es más, por internet se encuentran muchos resultados de páginas que apuntan hacia que un mayor grosor del suelo laminado implica un suelo de mayor calidad, y esto es una verdad a medias, porque faltan argumentos y consideraciones en esta afirmación para poder darla por correcta.

Así que no, un suelo laminado más grueso no es necesariamente mejor que uno más fino. Escoger el suelo laminado únicamente fijándonos en el grosor es, probablemente, una de las peores decisiones que podemos tomar.

Hoy os queremos hablar precisamente de este tema, como siempre aportando toda nuestra experiencia y con datos objetivos y contrastables como son los que aporta la norma europea y las fichas técnicas de los productos. Siempre decimos a nuestros clientes que la mejor elección es aquella que se hace con datos objetivos y, en este sentido, la ficha técnica del producto es la que nos da toda esta información.

¿El grosor de un Suelo Laminado determina su calidad y resistencia?

La respuesta a esta pregunta es que el grosor, por sí sólo, no determina si un suelo es de mayor o menor calidad. Es necesario tener en cuenta otros aspectos para poder determinar objetivamente su calidad y resistencia.

En artículos anteriores, hablábamos de que uno de los elementos fundamentales en la calidad de un suelo laminado es el material en que está elaborado el tablero. Hablábamos entonces de que los suelos laminados de mejor calidad utilizan serrín de fibra de madera, que aprovecha sólo la mejor parte del árbol.

Pero no sólo es importante el material empleado en la elaboración del tablero, sino su compresión, es decir, lo denso que sea ese tablero. Y esta compresión es precisamente la que determina si un suelo laminado es de mayor o menor calidad, junto otras cuestiones también relevantes y que comentamos en el post de blog mencionado.

Podemos encontrar tableros elaborados con la misma cantidad de fibra de madera, pero que en un fabricante tenga un grosor de 12mm y en otro un grosor de 8mm.

¿A qué es debida esta diferencia en grosores? Pues nada más y nada menos que a la compresión del tablero. Quiere decir que, en este caso, el tablero de 8mm es mucho más denso que el de 12mm, y esta mayor densidad ofrece muchas ventajas, haciendo que el suelo laminado sea de mejor calidad y más resistente:

  • Al ser un tablero más denso, se reduce la captación de agua, mejorando su comportamiento hidrófugo, por lo que resiste mucho mejor en presencia de agua y humedad deformándose menos (mayor estabilidad dimensional).
  • Al ser un tablero más denso, tiene un sistema de bloqueo del click mucho más robusto y consistente.

Por este motivo, los suelos laminados de calidad superior son aquellos que están muy comprimidos y un suelo laminado, no porque tenga 12 o 14mm va a ser mejor que uno de menor grosor. Para poder determinar su calidad, es esencial conocer su densidad.

¿Qué dice la normativa europea sobre el grosor de los Suelos Laminados?

Como comenta Juan Manuel Menaya en el video, la normativa europea que rige en materia de suelos laminados (norma UNE-EN 13329 de Revestimientos de suelos laminados), habla de la cantidad de madera que debe incluir un suelo laminado para fabricar 100 metros cuadrados de tarima con un grosor de 8mm. Esta cantidad, según la norma, es de 700 kilos para un suelo laminado AC4 con clase de uso 32 y 8mm de grosor.

En el mercado podemos encontrar suelos laminados de 8mm, pero que utilizan menos cantidad de madera. Por ejemplo, hay fabricantes que con 550 kilos crean tableros de 8mm, pero estos tableros son menos densos, por lo que se deforman más (en presencia de agua son menos resistentes por lo que se hinchan más) y tienen una menor resistencia de bloqueo. Este tipo de tarima siempre va a ser más económica, ya que lleva 150 kilos menos de madera, pero también será de menor calidad y resistencia.

Luego hay otros fabricantes que superan esta cantidad de madera por encima de lo que aconseja la norma, creando suelos muy superiores a la media.

Por ejemplo, nuestra colección de laminado Evolve emplea 950 kilos de madera en sus modelos de 8mm. Al utilizar más madera para el mismo grosor de 8mm, se comprime mucho más el material, creando un tablero muy denso (tableros HDF), bajando la captación a la humedad y aumentando su resistencia de bloqueo, lo que evita que las tablas se separen y se abran.

Entonces, ¿cómo escoger el grosor del Suelo Laminado?

Como hemos visto, queda claro que lo que hace que un suelo laminado sea de mayor calidad y resistencia no es su grosor, sino su densidad. Y para poder verificarlo, es importante consultar la ficha del fabricante.

Es por ello que escoger el suelo laminado atendiendo sólo al grosor, nos puede dar más de un disgusto.

Nosotros siempre recomendamos a nuestros clientes escoger el suelo laminado que mejor encaja en sus necesidades y se adapte a su presupuesto. Nunca recomendamos un grosor concreto, porque como hemos visto, dos suelos laminados de un mismo grosor, pero de fabricantes y marcas distintas, pueden diferenciarse en muchos otros aspectos como la densidad de su tablero, su resistencia al agua, la calidad de su sistema de click, etc.

Por ello, la cuestión realmente importante es conocer las necesidades y el presupuesto del cliente y en base a ello escoger el suelo lamido que mejor se adapte a cada caso particular.